Con base en el modelo de entrenamiento aplicado “aprender haciendo”, un equipo de 110 miembros del terreno pertenecientes a 35 Sociedades Nacionales de las Américas participaron durante 17 días en la Escuela del Terreno de las Américas (AFS) para responder a una crisis humanitaria en un área remota en la frontera entre la República Dominicana y Haití.
Los miembros del terreno fueron divididos en Equipos Regionales de Intervención (RIT) y equipos de Unidades Regionales de Respuesta ante Desastres (RRU), quienes revisaron numerosas cuestiones que incluían salud en emergencia, apoyo psicológico, alimentación y nutrición, agua y saneamiento, evaluación de Paquetes de Datos Abiertos (ODK), técnicas, distribución de Socorro Mega V, transferencias de dinero, albergo en emergencias y comunicación con los beneficiarios.
La AFS contó con 3 Delegados de IDRL y 1 Facilitador, quienes encararon dos situaciones conectadas con el Derecho Relativo a los desastres durante la operación de socorro. Durante el primer día de la AFS todos los participantes y facilitadores fueron detenidos por el ejercito Dominicano en el punto de revisión Pedro Santana. El ejercito afirmó que ellos no habían sido informados de la llegada de un grupo grande de extranjeros y que por consiguiente tenían que revisar todos los pasaportes y hablar con su línea de comando. Los Delegados de IDRL negociaron con el ejercito para que liberara a los participantes, alegando que la FICR suscribió un Acuerdo de Estatus Legal con la República Dominicana y que el gobierno debía facilitar el acceso de organizaciones humanitarias cuando se trataba de responder a un desastre.
En una etapa posterior, cuatro camiones de la FICR contentivos de bienes humanitarios esenciales que se dirigían a Pedro Santana procedentes de Haití fueron detenidos en las aduanas. Los delegados de IDRL facilitaron los procedimientos de aduana para la carga, mediante la revisión de la documentación que la FICR había presentado en las aduanas y presentando a los funcionarios de aduana Dominicanos la documentación faltante.
Se ofreció una sesión explicativa general sobre el despliegue legal a todos los participantes de la AFS. Dicha sesión resaltó las cuestiones que el oficial legal/delegado de derecho relativo a los desastres debía enfrentar, tomando en consideración las diferencias entre las cuestiones operacionales legales (atender los retos legales y riesgos del día a día de la operación de la FICR) y las cuestiones de derecho relativo a los desastres (tendiente a brindar apoyo al gobierno para que cuente con los instrumentos legales necesarios y así responder ante el desastre de manera efectiva). Los participantes expresaron su interés con respecto a los riesgos legales de una operación de emergencia y con respecto a la capacidad de la FICR de garantizar el acceso mediante su divulgación al gobierno.
La AFS constituyó una buena oportunidad para que el Programa de Derecho Relativo a los Desastres explorara aún más la necesidad y el concepto de un despliegue legal. El PDRD aprendió acerca de las cuestiones y retos legales que una operación de emergencia podría llegar a enfrentar al acceder a las víctimas e implementar programas de socorro en el terreno.